El frío fue el protagonista de los últimos días, provocando una participación mínima de moteros en la VI concentración motera invernal, y la baja asistencia de personas a algunos actos nocturnos del centro social
"Han finalizado las fiestas del barrio de San Antón, las más tradicionales del municipio, que suelen alargarse durante tres semanas: la primera, tras el día de Reyes, con el pregón, que este año leyó el químico tobarreño, Regino Sáez Puche; la segunda (la más tradicional), con las habituales pedimentas, las procesiones, el castillo, las carretillas y las pujas; y la tercera con la Concentración Motera y el mercadillo artesano.
Estos últimos días han estado marcados por las bajas temperaturas, lo que ha provocado la casi nula participación de participantes en la VI Concentración Motera invernal y la menor afluencia de personas a los actos nocturnos realizados en el centro social de San Antón - La Granja.
Ha contrastado el frío invernal de esta última semana con las excelentes temperaturas (casi primaverales) de los primeros días, lo que ha hecho que en muchos corrillos de vecinos del barrio, el tiempo fuese protagonista, por encima de las propias actividades de estas verdaderas fiestas de invierno del municipio, que se remontan en el tiempo y que siguen apostando por el mantenimiento de las tradiciones más ancestrales, que conviven con las nuevas aportaciones de la directiva de la hermandad que, en los últimos años, ha apostado por la innovación, con festejos muy populares y para todos los públicos.
Este fin de semana han finalizado las fiestas con la celebración de un gran número de actividades, que se iniciaron con la inscripción de participantes en la VI Concentración Motera que se desarrolló, pese a la baja participación, especialmente por el frío, aunque muchos apuntan también a la crisis como culpable de la casi nula asistencia (la más baja, con diferencia, de los seis años de concentración). No faltó a su cita el concierto del grupo Genuinos, muy esperado por la mayoría de los jóvenes (y no tan jóvenes) de Tobarra.
El gran fin de fiestas se vivió en la calle de La Parra con un intenso programa que se inició con una misa, pujas en la calle de La Parra para todos los públicos (son las únicas que se realizan sin carretillas), el Mercadillo artesanal, en el que, pese al frío, la asistencia no fue mala, aunque quienes se responsabilizaron de los puestos (con esparto, dulces, maquetas, regalos, etc.) mostraban sus caras ateridas, y buscaban las zonas de sol y el rescoldo de alguna estufa de las casas de la calle.
Por la tarde se ofreció un espectáculo de danza clásica y moderna, con los alumnos de baile de la UP. Y se realizaron las últimas pujas (en el transcurso de las mismas se sorteó el típico gorrino de San Antón), tras lo que se ofreció, para todos los asistentes un picoteo fin de fiestas. El cierre de estas largas y frías fiestas tradicionales, se realizó con pólvora de colores en la calle de La Parra, junto a la iglesia; y el deseo de todos de que las de 2012 sean menos frías."
G. González, La Tribuna de Albacete
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